Titlu ¿Quién eres?

Autor Megan Maxwell
Categorie De specialitate
Subcategorie Limba Spaniolă

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Martina es profesora y se resiste a tener que comunicarse con las personas a través de una pantalla, algo que se está poniendo muy de moda en la España de los noventa. Los chats atraen a todo el mundo, pero, sin duda, comienzan a ser una gran fuente de problemas. Y justo eso es lo que se encuentra Martina cuando, animada por unos amigos, acepta que entre en su casa, en su salón y en su vida su primer ordenador. Chats, amigos, risas, noches interminables de diversión... Todo se vuelve idílico cuando una persona de ese nuevo mundo, a quien ni ha visto nunca ni conoce, llama su atención, y su sola presencia a través de la pantalla la atrae cada vez más. Sin embargo, de pronto alguien la persigue y acosa, y empieza a tener miedo, sobre todo porque no tiene manera de averiguar si pertenece a la vida real o a la virtual. No te pierdas esta nueva novela de Megan Maxwell con la que, además de disfrutar de una bonita historia de amor, podrás sentir, a través de Martina, miedo, frustración y valentía. Casi 3.000.000 de ejemplares vendidos de todas sus novelas en papel en España.

Martina era guapa, joven, lista, simpática. Tenía todos los ingredientes necesarios para ser feliz, pero se negaba a darse la oportunidad de conocer de nuevo a alguien interesante y, como le había confesado en alguna ocasión, para ella el amor se había marchado con su ex. Ambas amigas se miraron. Se conocían muy bien. En la mayoría de las ocasiones una simple mirada lo decía todo entre ellas, y María soltó suspirando: —Como siempre te digo, tu felicidad comienza donde terminan tus miedos. —No empecemos. —Martina sonrió. María protestó. Veía en su amiga las ganas de llegar a casa, ponerse el pijama, prepararse algo de cena y tirarse en el sofá junto a su perro para ver algún aburrido concurso de la televisión o garabatear en el supuesto libro que estaba escribiendo para sí misma. ¡Planazo! Pero no, esa noche no iba a consentirlo, e insistió: —Mira que eres tostón. —Que no, María, ¡que no salgo! —Pero, vamos a ver, ¿acaso pretendes convertirte en una vieja solterona que vive rodeada de gatos? Martina soltó una carcajada. —No tengo gatos. Tengo un precioso perro y... —Terminarás teniéndolos, tronca —la cortó—. Y les darás atún rojo con caviar iraní y hablarás con ellos. Lo sé. Ambas rieron por aquello, y María insistió: —Venga, es una fiesta. Habrá basca de todos los lugares, religiones y colores. Además, te podré presentar a esos colegas que conocí por la red de los que tanto te hablo últimamente.